El persa

El gato persa es una raza de gato, característicos por tener una cara ancha y plana y un abundante pelaje. Son asociados comúnmente como gatos aristocráticos (el 75% de los gatos de pedigrí registrados son persas). Los primeros gatos persas fueron introducidos en Italia desde Persia en la década de 1620 y a sus descendentes se los llamó de muchas manera. La rama persa se desarrolló a finales de 1800.

Este gato es un felíno tranquilo, y sedentario. Por eso es un animal que se adapta perfectamente a la vida dentro de una casa. Además, es sociable, pacífico y muy afectoso. Demuestra un gran afecto a su amo y convive perfectamente con otros congéneres, como perros y con niños.
Aguanta la soledat de buen grado, suele mostrarse distando con los extraños y, en términos generales, prefiere un estilo de vida tranquilo, sin excesivos sobresaltos.